Los estudios de Derecho han estado presentes en la vida de la Universidad Autónoma del Estado de México, desde que el 14 de febrero de 1827 se publicó la primera Constitución del Estado, bajo la administración de Lorenzo de Zavala, primer gobernador de la entidad. En el artículo 228 del título VI titulado “De la instrucción pública” se estipuló que “En el lugar de residencia de los supremos poderes habrá un instituto literario para la enseñanza de todos los ramos de instrucción pública.” Este es el antecedente más remoto del Instituto Literario del Estado de México, fundado en 1828 que estableció su sede en Tlalpan, primera capital de la entidad, siguiendo el mandato del citado artículo.

Desde sus inicios y salvo en las ocasiones que acontecimientos como la invasión norteamericana o la intervención francesa provocaron el cierre temporal del instituto, se impartieron en sus aulas materias jurídicas. El Instituto Literario se transformó en Instituto Científico y Literario en el siglo diecinueve, y en Instituto Científico y Literario Autónomo durante los años cuarenta del siglo XX, sin que estos cambios implicaran la interrupción de los estudios de derecho. Por ello pareció obvio que al nacer en marzo de 1956 la Universidad Autónoma del Estado de México, una de las facultades fundadoras fuera la de jurisprudencia, siendo su primer director el Lic. Enrique González Vargas.

La Facultad de Jurisprudencia tuvo su primera sede en el edificio de Rectoría. En 1964 se trasladó a Ciudad Universitaria. En ese entonces sólo existían el actual edificio A o edificio antiguo, el auditorio Isidro Fabela Alfaro y se encontraba en obra el edificio que actualmente alberga la dirección. En 1981, la Facultad de Jurisprudencia pasó a llamarse Facultad de Derecho. Pocos años antes, en 1976, se habían iniciado los primeros posgrados. Durante veinticinco años se impartieron sobre todo maestrías y especialidades: en Derecho Penal, en Derecho Procesal, en Derecho de Amparo y la Maestría en Derecho con diversas áreas terminales. Finalmente, en el año 2000, inició el primer doctorado. La Facultad fue una de las primeras en desarrollar maestrías y doctorados profesionalizantes en línea a través de la plataforma Seduca de nuestra universidad. En los últimos años, los estudios de posgrado recibieron un gran impulso con la creación del Centro de Investigación en Ciencias Jurídicas, Justicia Penal y Seguridad Pública, hoy Centro de Investigación en Ciencias Jurídicas, en el cual investigadores de varios cuerpos académicos, muchos de ellos integrantes del Sistema Nacional de Investigadores en varios niveles, realizan investigación social y jurídicamente relevante.

Los estudios de licenciatura también han sufrido cambios, no solo por las numerosas transformaciones que el plan de estudios de la Licenciatura en Derecho ha experimentado para adecuarse a la evolución teórica de la disciplina y a las reformas legales, sino por la creación en 2015 de la Licenciatura en Medios Alternos de Solución de Conflictos, que ha introducido la idea de que el derecho ha de procurar la paz a través de la mediación y la conciliación, lo que ha fortalecido la cultura jurídica de la Facultad. La Licenciatura en Derecho cuenta con varias acreditaciones y reacreditaciones nacionales e internacionales, que avalan la calidad de los planes de estudio y su implementación.

Desde 1956 la Facultad no ha dejado de crecer, integrándola actualmente siete inmuebles: los edificios A, B y C, el auditorio Isidro Fabela Alfaro, el inmueble del Centro de Documentación Lic. César Camacho Quiroz, que además es sede del Centro de paz y diálogo, el edificio que corresponde a las salas de juicios orales y el del Centro de Investigación en Ciencias Jurídicas.

La Facultad no solo ha crecido en infraestructura. En 1956 tenía 400 estudiantes, en su gran mayoría, varones. En 1981, más de cinco mil estudiantes abarrotaban sus aulas. Actualmente en la Facultad de Derecho estudian 2,998 alumnos: 1,858 mujeres y 1,140 hombres (ciclo escolar 2023-2024). En la comunidad imparten cátedra 94 profesoras y 137 profesores. A la fecha, tres abogadas han encabezado la facultad desde la dirección, desde la cual se promueve la equidad de género en todas las acciones de la institución.

Nuestro organismo académico ha crecido en infraestructura, matrícula y calidad de sus estudios. No obstante, el mayor orgullo y carta de presentación de la Facultad de Derecho son sus egresados, hombres y mujeres que con su talento y esfuerzo, han construido y enriquecido las instituciones mexiquenses y el foro. Personas que dan su vida por los demás, en la lucha que día a día sostienen para que en nuestras relaciones cotidianas prevalezca las leyes, pero sobre todo, los principios que alimenta a estas y a nuestra disciplina, y que no son otros que la equidad y la justicia.